Con la Orden TDF/149/2025, del 12 de febrero pasado, el Gobierno ha puesto en marcha un plan para frenar las estafas telefónicas en las que los delincuentes se hacen pasar por bancos, organismos públicos o empresas para engañar a la gente y robar información personal o dinero. Entre las medidas destacadas, se prohibirán las llamadas comerciales desde números móviles y se bloquearán aquellas que manipulen su identificación para ocultar su origen.
Las estafas telefónicas, como el vishing (fraudes por llamada) y el smishing (fraudes por SMS), han aumentado en los últimos años, afectando tanto a ciudadanos como a empresas y dañando la confianza en las telecomunicaciones. Con este plan, el Gobierno busca proteger a los consumidores y restaurar esa confianza. Países como Finlandia han aplicado medidas similares y han conseguido reducir estos fraudes hasta en un 90%.
Las principales acciones que incluye este plan son:
• Bloqueo de llamadas y SMS sospechosos, como aquellos con números falsos o no asignados.
• Restricción de llamadas fraudulentas desde el extranjero, evitando que parezcan originadas en España.
• Creación de una base de datos para proteger los nombres de empresas en SMS, evitando que delincuentes suplanten su identidad.
• Prohibición del uso de números móviles en llamadas comerciales no solicitadas, obligando a las empresas a usar teléfonos fijos o números gratuitos.
El 7 de marzo comenzará el bloqueo de números no asignados, mientras que el resto de medidas entrarán en vigor el 15 de mayo. Además, en 2026 se implementará un registro para evitar la suplantación en SMS.
En resumen, este plan busca ponerle freno a las estafas telefónicas y dar más seguridad a los ciudadanos en sus comunicaciones diarias.
